Cada uno de nosotros dedica un promedio de siete horas y media al día al descanso, durante toda su vida.
Lo que muchos consideran tiempo perdido, es en realidad un tiempo muy valioso,
ya que durante el sueño y el descanso, el organismo repone energía y reajusta su funcionamiento, reparando daños, reconstruyéndose y posibilitandonos estar en buenas condiciones al día siguiente.
ya que durante el sueño y el descanso, el organismo repone energía y reajusta su funcionamiento, reparando daños, reconstruyéndose y posibilitandonos estar en buenas condiciones al día siguiente.
Cuándo no descansamos bien, todo nos cuesta más, nuestras defensas bajan, estamos más vulnerables a las enfermedades, reaccionamos con lentitud, nos duele el cuerpo...bueno ¿quién no se ha sentido así alguna vez?
Ahora bien, si es tan importante el descanso para nuestro bienestar, ¿no sería importante analizar con detenimiento la cama dónde descansamos?
¿Nos brinda la comodidad necesaria?
¿Protege nuestra columna vertebral, posibilita su descanso?
o por el contrario, sentimos que nos levantamos con dolores en el cuello y la espalda ?
En ese caso, deberías considerar cambiar de colchón y de cama, tu cuerpo y tu salud te lo agradecerán. Tu desempeño y productividad se incrementarán, tu ánimo mejorará, te levantarás lleno de energía para iniciar la jornada.
Tu calidad de vida no tiene precio, no lo ovides.
No hay comentarios:
Publicar un comentario